¿Sabías que las mitocondrias son la clave para disfrutar de una vida llena de salud y energía?

Las mitocondrias son las centrales energéticas de nuestras células, encargadas de convertir el oxígeno y los alimentos en energía. Pero sus funciones van más allá, por ejemplo, son las responsables de mantener nuestra temperatura corporal y constituyen unas sofisticadas factorías de ‘piezas’ necesarias para el funcionamiento celular.

La salud de nuestras mitocondrias depende casi siempre más de nuestros hábitos que de la suerte o la genética. Por ejemplo, sin actividad física nuestras mitocondrias sufren, se vuelven perezosas y dejan de producir energía.

Por otro lado, el estrés crónico también es una carga excesiva para nuestras mitocondrias que las lleva al agotamiento. Lo mismo ocurre con la falta de sueño, ellas se reparan del desgaste diurno durante el descanso nocturno, si las privamos del sueño mermamos su capacidad de producir energía y las condenamos a la disfunción. Solo tienes que pensar en lo cansados que nos sentimos tras una mala noche.

Una dieta saludable también ayuda a que nuestras mitocondrias están sanas.  Prioriza verduras de hoja verde, ricas en magnesio, frutas ricas en antioxidantes como la granada y los frutos rojos (especialmente los arándanos), brócoli y coliflor por tener sulforafano, un fitoquímico que mejora la salud mitocondrial. Incorpora grasas saludables antiinflamatorias como las presentes en el pescado y marisco, los huevos de gallinas “felices”, los frutos secos, el aceite de oliva virgen extra y la palta; además de las especias como la cúrcuma, el jengibre o el romero.